Si te hubieran dicho hace 9 meses que el lugar donde vives iba a ser tu nuevo cine, tu gimnasio, tu oficina, tu zona gourmet, tu spa de relajación, tu sala de belleza, la escuela de tus hijos, tu casa de veraneo y tu destino de vacaciones de invierno, nos hubieras mandado al siquiatra…
No obstante la realidad nos ha mostrado la versatilidad de nuestra casa, a fuerza de adaptación y resiliencia (palabras domingueras que significan agua y ajo, el que entendió, entendió).
Así, hemos descubierto todos los usos que puede tener una barra de cocina: oficina, comedor, barra de chef, mesa escolar, base de comunicaciones via zoom, y hasta plataforma del challenger en el proyecto de 5º grado de ciencia y reciclado.
Como nunca antes, el espacio se vuelve algo muy valioso y creo sinceramente que ha nacido un nuevo estilo de vida con hogares multifuncionales donde el home office, los espacios para recibir grupos de amigos cercanos así como áreas de creatividad y convivencia familiar llegaron para quedarse.
Nuestros hogares necesitan tener una distribución práctica y nosotros debemos usar el espacio de manera inteligente por lo que hoy te decimos 6 cosas a las que puedes decir adiós:
- Demasiados adornos empolvados, juguetes viejos y tus recuerdos de la secundaria. Tus recámaras son un lugar para descansar, por lo que sentir que se te viene encima todo desde tu cama no es buena idea, sobre todo hoy que quedaría mejor un pequeño escritorio en ese rincón donde amontonas desde ropa vieja, libros que ya leíste y flores secas de tu última cita.
- Aparatos de cocina, utensilios repetidos y ollas viejas. A todos nos ha salido el chef que llevamos dentro durante esta pandemia, pero piensa lo que realmente usas y quédate con ello. Esto te permitirá respirar en tu cocina y cocinar cómodamente, en vez de que te de flojera solo en pensar en sacar el molde que queda atrás de 20 cosas que no usas.
- Tecnología del siglo pasado. Tu colección de DVD´s. tu reproductor VHS, el fax y hasta el Nintendo 1 que ya no prende, sólo están acumulando polvo bajo la tele. Piensa en el mercado de coleccionistas que se van a pelear tu versión original de Nemo y saca todo eso de tu casa. Atrévete a invitar a Alexa y gana espacio y confort con muy bajo presupuesto.
- Souvenirs y figuritas pequeñas. No digo que tires todos tus recuerdos, pero puedes ordenarlos, guardar algunos, tirar los que ya les falta una orilla y liberar los espacios que no te permiten ver los libros de tu estante. Así tu casa puede cambiar de un museo empolvado a un hogar con memorias y recuerdos.
- Demasiados obstáculos. Camina desde la entrada de tu departamento hasta la ventana, si en el camino te encuentras demasiadas cosas y te tropiezas con todo, debes pensar en sacar algo. No tengas miedo, un espacio despejado es más luminoso y muestra mayor armonía.
- Demasiados cojines y portarretratos. Si cada vez que te quieres sentar tienes que quitar los veinte cojines del sillón y si todas tus repisas y mesas están repletas de marcos con tu foto hasta del día de tu primera comunión, es tiempo de ordenar en albums, escoger tus favoritas, tirar los marcos rotos y despintados y escoger solo los cojines que sean cómodos y mandarlos a la tintorería. Tu espacio debe ser cómodo y transmitir orden y limpieza sobre todo con el multitask que le exiges hoy a tu sala de estar.
Pues sí, ya son muchos meses de encierro y de reorganizar toda nuestra vida en torno a nuestro departamento;, nuestro hogar hoy es nuestro centro de operaciones y es nuestra tarea cambiar en todos los aspectos, por lo que nuestra nueva forma de vivir debe dar prioridad a la comodidad y la funcionalidad y controlar a nuestro yo acumulador, la vida es HOY y nuestros recuerdos están en el corazón.